lunes, 30 de abril de 2012

Entrevistas a la luz de la hoguera (III)

Un día más nos sentamos a la luz de la lumbre, con una copa de vino y dejamos pasar el tiempo hablando de caza....
Hoy entrevistamos a Juancho Narvaez y Muguiro, Marques de Benavites, y representante de la Organización de Monterías "Tradición Española de Caza".

1.           Tu gran afición por la caza, ¿de dónde proviene?
Desde niño acompañando a mi padre que tenía rehala y monteaba muchos días.

2.           ¿Cuánto hace que comenzaste a cazar?
Como tengo casi 60 años, pues hará ya medio siglo que salia con una escopeta de 9 mm a tirar conejos, tórtolas, palomas,... lo que podía en una finca que tenía mi padre en Trujillo.

3.           ¿Qué significado tiene la caza para ti?, ¿de qué manera ha influido en tu vida?
Es, después de mi mujer y mis hijos, lo más importante, tanto que llevo varios años viviendo de la caza.

4.           ¿Eres cazador de menor, de mayor o ambas?
De ambas.

5.           ¿De entre las modalidades cinegéticas practicadas en España, ¿tienes preferencia por alguna? ¿por qué?
Sin duda, por la montería. Es única en el mundo por la emoción que puede llegar a transmitir.

6.           Centrándonos un poco en tu experiencia cinegética personal, me gustaría que nos contases cómo viviste tu primer lance.
Fué en "El Avellanar", preciosa finca de los montes de Toledo. Cazabamos 2 días, 8 ó 10 escopetas sólo con la rehala de "Ciguiñuelas" que era la finca de al lado.
En el último "gancho" del 2º dia maté mi primer venado con un express 9.3 x 74 de mi padre. Era el día 8-02-1970.

7.           Imagino que de entre tus innumerables recuerdos cinegéticos, alguno seguro que es especialmente significativo. ¿Nos harías partícipes del mismo?
Creo que fué cuando maté mi primer guarro a cuchillo, en una montería de Sierra de San Pedro. La finca "Campomacías" y la rehala que lo sujetaba era del pueblo de Aliseda. La fecha el 13 de Enero de 1974.

8.           El lance que recuerdas con más cariño ...
Cuando mi hijo Alvaro mató su primer venado, en un puesto de "testero" en "Los Campillos" de "Ciguiñuelas"

9.           El lance más espectacular que has vivido ...
Otra vez en Ciguiñuelas. En la mancha de "Tragabalas". Fui a intentar rematar con el cuchillo un guarro grande que se había "pasado" con sólo 3 ó 4 perros.
Hacía muchisimo calor y los perros no podían sujetarlo. En cuanto al guarro me vió se me vino como un tren derecho a por mí. Si no llego a llevar el rifle me da un buen susto.

10.       De todos los cazaderos que has podido conocer ¿Hay alguno que te resulte especial?
"Pinos-Altos" en la provincia de Ciudad-Real. Fué donde empecé a organizar las primeras monterías. Cazabamos sólo amigos con mucha afición.

11.       Hablando de especies cinegéticas ¿te quedas con alguna en concreto?
No, para mí todas las especies cinegéticas son igual de importantes. Me gustan todas.

12.       Cuéntanos alguna anécdota cinegética que te haya ocurrido.
Fué una noche de verano,haciendo un aguardo en"Pinos-Altos" que estará a 30 o 40 kms de Ciudad-Real. Serían cerca de las 12 de la noche cuando, de repente, sin ruido ninguno, un enorme resplandor lo iluminó todo durante varios segundos. Hilario, el guarda, que me acompañaba y yo quedamos totalmente desconcertados y algo asustados. Al día siguiente supimos que había explotado la fábrica de Butano de Ciudad-Real.

13.       ¿Qué prefieres, escopeta o rifle? (comenta un poco el arma y modelo que sueles utilizar)
Me gustan ambas. Mi rifle es un SAKO 30-06 de cerrojo. Tengo dos repetidoras para las tórtolas y la paloma y una Aya del 12.
Creo que el 30-06 es el más completo para España. Pero soy muy poco entendido en armas.

14.       En cuanto al papel de las rehalas en nuestra montería tradicional ¿qué comentario te merece?
Lo son todo. Sin ellas no habría montería.

15.       Habrás visto cazar infinidad de ellas y seguro que puedes citar alguna/s que te hayan llamado especialmente la atención ….
Hay muchisimas grandes rehalas. Para no cansarte citaré sólo la que mi padre tenía en Ventas con Peña Aguilera en la época en que los perros iban a la "Cita" acollerados detrás de su perrero que, a caballo, les guiaba desde el pueblo hasta la finca que íban a cazar.

16.       Cuando vas de montería, ¿qué tipo de puesto prefieres que te toque en suerte (cortadero, torreta, testero, un portillo, gatera?¿por qué?
Como ya estoy muy sordo, me encantan los testeros. El cortadero tiene más emoción pero hay que tener buen oido.

17.       ¿Eres aficionado a la lectura? En caso afirmativo, nombrar tus preferencias y contestar a la siguiente pregunta, ¿Y a la literatura cinegética? ¿Cuál es el último libro que te has leído?
Me encanta leer libros de historia y novelas leo también todo lo cinegético que cae en mis manos.
Lo último que he leido son los "Lances camperos" de Manolo de Juan y "Del monte y la montería" de Mariano Aguayo.

19.       ¿Tu plato gastronómico cinegético preferido? ¿Con qué bebida lo acompañarías?
Creo que un buen solomillo de corzo. Me encantan los tintos de la Rioja, sobre todo el Riscal.

sábado, 21 de abril de 2012

Primeras salidas a los corzos

Llevamos quince días de abril, el campo está recibiendo algo de agua, que sin duda se necesita en toda la península. Los partes meteorológicos en la mayoría de los casos daban lluvias, aunque no siempre ha caído el agua suficiente.

En los meses anteriores habíamos identificado varios corzos, algunos todavía con correal y otros apunto de quitárselo de encima.


Esperábamos con impaciencia el inicio de la temporada. Llego por fin el día 1 de abril, que cayó en domingo por lo que decidí subir a Burgos a estrenar nuevo coto. Ese primer día me fui con las ganas, empezó a llover nada más llegar al coto, la tarde se puso desapacible, aunque las ganas y la ilusión lo ponían todo mucho más optimista.

Iba pasando la tarde y en las siembras no había movimiento, esperé hasta que cayese el sol, por si en ese momento algún corzo receloso se asomase, pero no hubo suerte.

Días más tarde llegó la semana Santa, tocaba ir a Ciudad Real ha pasar esos días de vacaciones. Estos corzos de aquí los teníamos un poco más identificados, aunque ya se sabe que a los corzos les gusta dejarse ver cuando no puedes cazarlos y desaparecen cuando se puede ir a por ellos.

Salimos tres tardes con suerte dispar, la primera tarde fue el jueves Santo, después de los oficios y con unos nubarrones que presagiaban lluvia. Nos fuimos a una parte de reciente reforestación, que es muy querenciosa para los corzos, debido a que ramonean los brotes nuevos que están tiernos recién salidos.

Nada más bajarnos del coche empezó una tormenta de agua y granizo, que hizo que durante unos minutos volviéramos al coche y esperásemos que escampara. Cuándo bajo la intensidad de la tormenta se quedo una tarde muy buena.
Empezamos a recechar, fuimos oteando cada palmo de la reforestación en busca de algún movimiento. A lo lejos vimos un bicho que por la distancia no supimos identificar, en vista de la lejanía nos dispusimos a ir en su búsqueda para tenerlo al menos a tiro de prismáticos. Nos fuimos acercando mientras el corzo se iba moviendo poco a poco entre las filas de alcornoques y encinas. Más o menos íbamos acortando distancia hasta que por fin cuándo nos encontramos a una distancia razonable, pudimos comprobar que se trataba de una corza. Se nos hizo tarde y dejo de verse con claridad por lo que pospusimos otra búsqueda para el siguiente día.

La tarde del viernes Santo nos dispusimos a recechar otra zona, esta vez, un valle surcado por un pequeño arroyo, en el que sabíamos que tenía que haber un macho porque estaba marcando el territorio aunque no lo habíamos visto.
Pasamos toda la tarde escudriñando el vallejo, dando solo con varias corzas y la piara de guarros con rayones que ya comente en otro post anterior. Del macho, nada de nada, aunque volvimos a ver muy marcado su territorio y con evidencias de que por allí tenía que encontrarse.

La última tarde, volvimos otra vez a la zona reforestada. Entramos a contra mano de como lo habíamos hecho la vez anterior. Fue transcurriendo la tarde, divisamos varías corzas, alguna bien gorda, presagio de una buena paridera.
En un momento dado, con los prismáticos le pareció, a mi hermano Jacobo, ver unas orejas debajo de un chaparro. A su indicación me puse a mirar también y cual no fue nuestra sorpresa cuando encontramos tumbado un corzo.
Estaba ajeno a nuestra presencia, le asomaban los cuernos por encima de las orejas, tenía bien formadas las seis puntas. Lo único malo era que estaba tumbado y el tiro era imposible.

Nos fuimos acercando, Jacobo llevaba el rifle y a cada paso me preguntaba si podía tirar o esperaba. Yo desaconsejaba un tiro tumbado, por la facilidad de errar el lance. Le dije que estuviera atento porque el corzo podía levantarse y salir corriendo, si nos pillaba en el acercamiento.

Pudimos acercarnos a tan solo 50 metros, ya que ante algunos silbidos el corzo no se había movido. Le dije a mi hermano que le apuntara, que iba a atraer su atención y que tenía que ser rápido. Así hizo, a una indicación mía, pegue un leve grito, levantándose el corzo sorprendido, momento que aprovecho mi hermano para cazar su primer corzo.
Después de las felicitaciones de rigor, las fotos y el avío de la canal, nos volvimos a casa felices por acabar la Semana Santa de la mejor forma posible.

JAA

miércoles, 18 de abril de 2012

Libro Campo y Caza. Obra gráfica 1974-2011. del escritor Javier Barcáiztegui (Barca).


Ayer día 17 de abril, invitados por Juancho Narvaez, fuimos mi padre y yo a la presentación del libro Campo y Caza. Obra gráfica 1974-2011.

Me hizo especial ilusión por el parecido con el nombre de este blog Caza y Campo y también por recibir de manos del autor una copia personalizada del citado libro.
La cita fue en el edificio de Mercedes España. Allí comenzo el acto, no sin antes saludar a viejos conocidos y monteros como, Perico Castejón, Juancho, Ricardo Ayala, Lolo de Juan, etc. 

Presentado por La Trébere Editorial, entre el público se encontraba la Presidenta de la Comunidad de Madrid, además estuvieron Pedro González Arispe, responsable de la editorial La Trébere, José Luis López-Schummer, vocal de la Junta Nacional de Homologación de Trofeos de Caza, el escritor y prologuista de este libro Alfonso Ussía y el Marqués de Laserna, que realizó la introducción de la obra. 

Entre guiños anecdóticos, como la presentación del primer coche Mercedes en el mundo, o la coincidencia escolar de Ussía y Barca se presentó una de las obras recopilatorias con la colaboración de más de cincuenta cazadores en la que, no olvidamos, Mariano Aguayo realiza el epílogo.

Un recorrido por su trayectoria como artista, un libro con poca letra, -casi un estribillo- compone una melodía que ha sabido recoger el ritmo de lo acontecido en nuestros campos. 

El libro ‘Campo y Caza. Obra gráfica 1974-2011’ consta de cuatro capítulos con 170 ilustraciones en gran formato repartidas en sus 250 páginas. La especial forma de entender el campo, sus habitantes y anécdotas que tiene Barca traduciéndolos al inigualable idioma de los trazos sencillos, haciendo entendibles costumbres, ambientes, lances y parajes reales o ficticios -como lo son sus animados personajes- toman vida y se perpetúan entre estas páginas.

Desde este blog, muy agradecido a mi padre por invitarme al acto.

JAA


martes, 10 de abril de 2012

Llego la Primavera!


Estos días de comienzos de abril he podido pasar unos días en el campo. En Ciudad Real está el campo muy necesitado de agua, todavía esta gris, del pasto seco del invierno y apenas asoman algunos claros verdes de las primeras hierbas de primavera.

Menos mal que estos días ha llovido un poco, aunque todavía no corren los arroyos. Mal síntoma, pero aún se puede arreglar si lo que queda de abril sigue lloviendo.

En mis salidas al campo, he intentado buscar al duende, que por estas tierras ya se puede cazar. Hubo varios encuentros pero ninguno con un macho, muchas hembras que pacían tranquilamente y algún varetillo de primera cabeza.

Uno de los días me ocurrió algo insólito. Entré en una zona de reforestación, donde a lo lejos había visto una corza. Mientras iba concentrado en que no me viera la corza, escuché el bufido de un guarro no muy lejos de donde acababa de pasar, aunque algo más abajo. Volví tras mis pasos esperando ver al cochino y lo que me encontré fueron dos. Una gran cochina y un primalon ya grandote. Me resulto raro ver que no corrían demasiado sino que miraban para atrás. Aunque al acercarme más ya sí que huyeron. La guarra era grande y se le notaban las mamas a cierta distancia.
Cuando empezaba a volver sobre mis pasos, en busca del acomodo de la guarra y su pariente, levante de las mismas camas a tres rayones que salieron despavoridos en dirección contraria a la de la madre. No quisé seguirlos para no desperdigarlos más.
Cuál fue mi sorpresa cuando a los pocos minutos, y sin que yo me hubiera movido demasiado de donde estaban las camas, vi a los rayones volver tras sus pasos.
                             
                                          
                  


                    
El caso es que estuvieron casi una hora dando vueltas, mirándome, incluso llegaron a tumbarse en las camas durante un rato. Pude divertirme un buen rato haciendo fotos y los vídeos. Casi espantaron a las corzas en sus idas y venidas, ya que en un momento dado pasaron los tres muy cerca de donde ellas estaban y les debieron pegar un susto.

Ahora una vez de vuelta al trabajo, espero que los pobres encontrasen pronto a su madre. Para mi fue un encuentro fortuito pero muy gratificante a la vez. 

De los corzos, nada de nada, espero que en mis salidas de abril tenga algo más de suerte, ya os iré contando.

JAA