sábado, 31 de diciembre de 2011

Feliz año 2012

Hace ahora doce meses, en enero de 2011 comenzaba la singladura del blog. Durante estos meses he podido compartir vivencias, lances, crónicas y un sin fin de días en el campo. Mi pasión, mis ganas de aprender y de comunicar mi legado se han visto reconocidos en todos y cada uno de los post de este blog.

Han sido meses intensos, con cambios de diseño, nuevas entradas, muchas salidas al campo, innumerables fotos...pero este blog no seguiría en píe sin sus seguidores, ni sin todos los que entráis alguna vez para leer, disfrutar, y vivir las historietas de caza y campo.

Según avanzaban los meses, hemos pasado del final de temporada montera, a los recechos de corzo, pasando por la media veda, la primavera y vuelta a la temporada de monterías.
Desde este blog he querido transmitir los valores que aprendí desde pequeño, acompañando a mis abuelos Alfredo y Juan, y después a mi padre. Valores que no se pueden perder, cómo la Salve Montera, el Manifiesto de la Montería, el buen comportamiento en la caza, etc, etc.

Dentro de pocos días celebraremos el primer aniversario de Caza y Campo, y muchos más que celebraremos juntos, porque la razón de ser de este blog sois vosotros, y yo solo doy rienda suelta a mis ilusiones. Para este nuevo año le pido que encuentre trabajo, porque aunque eso me quite de estar más tiempo en el campo, es muy necesario.

Gracias por el primer año de Caza y Campo y que cumplamos muchos más!!!

JAA

jueves, 22 de diciembre de 2011

Navidad 2011

Desde el blog Caza y Campo os deseamos Feliz Navidad y próspero año 2012, cargado de ilusiones, trabajo y buena caza.

From the blog Caza y Campo we wish you merry Christmas and happy 2012. Full of dreams, hard work and good hunting.

Depuis de blog Caza y Campo et nous vous souhaitons joyeux Noël et 2012 heureux. Pleine de rêves, travailler dur et bonne chasse.

Aus dem Blog Caza y Campo wünschen wir Ihnen frohe Weihnachten und ein glückliches Jahr 2012. voller Träume, harte Arbeit und gute Jagd.

Из блога мы желаем вам веселого Рождества и счастливого 2012 года. полны мечтаний, тяжелый труд и хорошие охоты.

JAA

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Monterías final de año

Como os avancé en algún post anterior, durante este mes de diciembre he tenido varias monterías. La primera durante el puente de la Inmaculada y la otra hace unos pocos días.
Estando en El Robledo durante el puente, me aviso mi hermano Alfredo de una montería en el cercano pueblo de Chillón. Por supuesto acepte la invitación, era un sábado y parecía que iba a hacer un buen día de caza.

Hasta allí nos fuimos, como no quería ir solo le dije a mi padre que me acompañará al puesto. La junta fue a las 9 en un bar del pueblo. La organización de esta montería y de otras que organiza este grupo suelen ser por la zona de Almadén, Saceruela y Chillón. El sorteo de puestos nos deparo un puesto en medio de la mancha, en un camino estrecho pero con posibilidades. O eso creíamos porque el puesto se situaba en una zona de curva con poco tiradero y además el aire no nos era favorable.


Nada más soltar se sucedieron las carreras y las ladras, se notaba que la mancha estaba cargada, aunque nosotros al estar aireando notábamos cómo las reses bordeaban el puesto para aparecer en las traviesas que teníamos más cercanas.
El día iba avanzando, poco a poco el sol se fue cubriendo por encima de la sierra y efectivamente notamos que se cazaba una umbría.
Hacía la una de la tarde, la rehala que batía el monte, saco de su encame una res, que comenzo su huida hacía nuestro puesto. La tensión se palpaba, por cómo rompía monte notábamos que se trataba de una res grande, posiblemente un venado. La ladra se hacía más intensa, notamos que se alejaba un poco del puesto, nos iba a cruzar por la izquierda. Esperábamos que no muy lejos, pues al estar en curva el puesto podíamos no llegar a verlo y efectivamente por allí cruzo el venado. Solo le vimos la cabeza, que portaba unas grandes cuernas, seguidamente llegaron los perros, cruzaron el camino y siguieron la ladra hasta el sopíe, donde se escucharon varios tiros.

Nos lamentábamos por la mala fortuna, cuando otra ladra nos interrumpió. Esta vez los perreros cantaron que se trataba de un cochino, la ladra sonaba por la derecha y parecía tener mejor pinta que la anterior.
Aguantamos la respiración, el pulso se aceleraba, el ruido de los perros se acercaba, faltaba sólo que saltase al camino el guarro, cuando empezamos a notar que corría en paralelo al puesto y se alejaba. Finalmente lo que fuera, junto con los perros cruzo el camino por donde no pudimos verlo.
Otra vez lo mismo, pero esta es la ley no escrita de la caza, donde las especies cinegéticas tienen su forma de participar, ganando la partida a los cazadores, mientras buscan las mejores trochas y veredas para escapar de los puestos.

Así acabo la montería, sin ningún lance más. El resultado, ya en la junta, después de tomar unas judías con carne y de ver los últimos puntos de la final de la Copa Davis, fue de 5 venados y 15 cochinos. Resultado más que aceptable teniendo en cuenta que se trata de una finca abierta.

El resto del puente aproveche para salir al campo y sacar algunas fotos, las cuales no tienen mucha calidad, al estar realizadas con una cámara pequeña, pero que os dejo porque el campo esta ahora en su estado más bonito.





Este pasado fin de semana, cazamos la segunda montería de la acción de El Rondal. La mancha Huerta Vieja albergaba grandes espectativas. Esta vez invite a mi buen amigo Alfonso Urbano a la montería, la suerte nos deparó que nos tocara a los dos juntos. Él en el 1 de El Cotillo y a mi en el número 2.
Alfonso, está comenzando a escribir un blog de caza. Desde estas líneas animó a que leáis también sus crónicas de caza porque son muy buenas. Os dejo el enlace a su blog: Blog crónicas de morral

El puesto se encontraba al final de la mancha, en una hoya que cruzaba la raya, presentándose varios puestos en la umbría y varios en la solana.
Los nuestros se encontraban en la zona de umbría, siendo los de solana los que se encontraban del puesto 4 al 6, que se encontraba cercano a unas peñas.
Al llegar al puesto, noté una res moviéndose a pocos metros del puesto. Quizá intuía que la mancha se estaba cargando de olores extraños y ruidos reconocibles, pero no menos inquietantes.
Nada más soltar los perros sentí que aquel animal aceleraba el paso alejándose del puesto y yendo a cruzar por el puesto 3, el cual disparo quedándose con él.

La mancha estaba en ebullición, por la solana se sucedían las carreras y las ladras, también los disparos de los monteros. Las reses estaban claramente volcadas en la solana, pues en el cierre se estaban hinchando a tirar y ver piezas.
Así fue transcurriendo la mañana. Tengo que decir que desde mi puesto no podía mirar al de Alfonso pues justo en la vertical tenía el sol y no conseguía ver nada. Rezaba yo para que no pasase nada por allí y si lo hacía fuera más cercano al puesto de Alfonso para que pudiera tirarlo él.

Cuándo cruzaron los perros la traviesa, nos cambiamos todos al lado contrario, donde podíamos tirar mejor si las reses nos cruzaban por el lado izquierdo. Al rato de cruzar, salto la ladra, corrieron los perros y se hizo un estruendo en el monte. Me preparé, saltaron a la raya dos ciervas, disparé no acertando el tiro, cerrojeé y pude disparar otro tiro justo cuando se metían al monte. Nada de nada, no estaba acertado con el tiro. 
Minutos después se repetía la escena. Una ladra que comienza, seguida de una carrera de una res. Me preparo, esta vez la carrera va a pasar más cerca del puesto 3 que del mio, pero todavía hay esperanzas. Al momento surge otra cierva que cruza velozmente la traviesa entre los dos puestos, disparo pero el tiro se queda atrás.

De aquí al final de montería, se suceden las voces de los perreros que de vuelta a los camiones van en retirada por el monte. Finalizada la montería, comparto con Alfonso las impresiones de la jornada, quedando claro que las reses estaban volcadas en la solana, ya que la noche anterior había sido de viento y lluvia.
La junta de carnes presenta un plantel numeroso de 10 venados y 16 guarros, entre los que destacan dos buenos macarenos.



Desde aquí, aprovecho para felicitaros la Navidad, deseando una buena Nochebuena y un buen día de Navidad.
JAA

viernes, 16 de diciembre de 2011

El fáctor más importante


“No hay verdadera montería sin perros”, escribía el Conde de Yebes en su libro Veinte años de caza mayor. Estos primeros días de temporada, cuando el tiempo todavía se asemeja más al verano que al otoño, se ha cazado en numerosas fincas de España. El calor ha apretado de lo lindo y quienes más lo han padecido han sido los perros y los perreros, las rehalas.


Me consta que muchas monterías, cuyas manchas estaban sopadas de jabalíes, sólo han cobrado unos cuantos y la mayoría se ha quedado en el campo. Con este tiempo los perros corren tras las reses, cansándose a menudo a las primeras de cambio. No en vano estamos en su pretemporada. Con el calor, se pierden los rastros y es más difícil sacar a los marranos de sus encames, incluso a veces éstos se dan la vuelta contra los perros, que les miran con desdén, ya que no tienen fuerzas para seguirlos.

Por supuesto, los cazadores y los organizadores también se incomodan por estas temperaturas, los segundos se afanan en comenzar cuanto antes para no cazar durante las horas centrales de más calor y los primeros van buscando la sombra y quitándose capas de ropa.

Porqué digo todo esto, fundamentalmente debido a que existe la impresión de qué lo fundamental en una montería es que este buena de reses, qué los dueños de las fincas las hayan cuidado bien durante la veda, qué los monteros tiren bien, y muchas veces nos olvidamos que el factor más importante es que las rehalas cacen bien. Porque cuándo en la junta vemos un buen plantel de reses y cochinos, anteriormente el cazador ha tenido que tirar correctamente, ha tenido que jugar el lance como es debido, ha tenido que entrar la pieza al puesto, y eso ocurre solamente cuando la rehala ha hecho su trabajo y ha levantado a las piezas de sus encames. Sin los perros no hay montería, puesto que esto no es un ojeo, en el que con los ojeadores basta. 
No voy a entrar en las cualidades de cada rehala, de eso saben y mucho sus dueños y los buenos “podenqueros”, yo solo digo que, gracias a éllos, estos días de otoño en los que se ha cazado con temperaturas rondando los 30 grados, se ha podido cazar en condiciones.

El pasado fin de semana, las rehalas se fundieron en apenas una hora. Se veía a los perros y perreros con la lengua fuera, buscando la sombra y algo de agua, que a buen juicio del organizador se había preparado en bidones por toda la mancha. Me consta que la finca estaba cargada, pero tras las primeras ladras y carreras con las reses, ya no hubo quién sacara un solo macareno de su encame. Allí estaba todo bien preparado, se cazó pronto, los monteros se colocaron en silencio, se había cerrado convenientemente la mancha, pero… Otro día, con otra temperatura hubiera sido un espectáculo, pero falló el factor fundamental, y no por malos perros, sino porque el tiempo todavía no ha dado su permiso para comenzar la temporada. A partir de ahora buena caza.
Artículo públicado en la web www.montearenandalucia.es en octubre de 2011
JAA